Llegamos al super, y elegir un simple bote de leche nos cuesta media hora…entera, desnatada, con calcio, con omega-3, con aceite de oliva, con fibra, con CLA…Estos son los nuevos alimentos, que llamamos alimentos funcionales.
Los alimentos funcionales nacieron en JAPÓN EN LA DÉCADA DE LOS 80, PERO SU EXPANSIÓN Y CRECIMIENTO HA SIDO ASOMBROSA. Se calcula que en España, en el año 2006 se gastaron 35000 millones de euros en alimentos funcionales, y la previsión que se haya multiplicado por 10 en cuatro años-
¿Por qué unos alimentos son funcionales y otro no?
Un alimento se considera funcional porque, además de destacar por sus propiedades nutritivas, contiene ciertos elementos, cuyo consumo diario dentro de una dieta equilibrada constituye a mantener o mejorar nuestro estado de salud y bienestar.
Lo alimentos funcionales deben comerse dentro de na dieta sana, variada y equilibrada, y en la misma cantidad que la que normalmente consumimos el resto de alimentos.
Características de un alimento funcional
1. Ser un alimento funcional o de uso diario
2. Ser consumido como parte de una dieta normal o usual.
3. Estar compuesto por componentes naturales.
4. Ejercer un efecto positivo en determinadas funciones del organismo más allá de su valor nutritivo básico.
5. Mejorar el estado de salud y\o reducir el riesgo de enfermedad o aportar beneficios para la salud como mejora de la calidad de vida, incluyendo el rendimiento físico, psicológico y de comportamiento.
CLA | PROBIÓTICO | OMEGA-3 | FITOESTEROLES | PREBIÓTICO | FOS…
¿Para que sirven?
Los componente que se encuentran en los alimentos funcionales han estado siempre presentes en la naturaleza, pero en los últimos años es cuando se han estudiado por separado y evaluado sus efectos beneficios para el organismo.
Las más destacables con; fibra dietética, azúcares, alcoholes o azúcares de naja energía, aminoácidos, ácidos grasos insaturados, fitoesteroles, vitaminas y minerales antioxidanes, bacterias ácido-lácteas y otras sustancies excitantes o tranquilizantes.
Son microorganismos vivos que se ingieren con algunos alimentos y que tienen efectos positivos al actuar sobre la flora bacteriana del intestino.
Los omega-3 se han encontrado presentes de siempre en nuestra alimentación, se encuentran en el pescado azul, como atún, sardinas, salmón, caballas…
Se trata de un tipo de grasas poliinsaturadas, que debemos incluir en la dieta, puesto que muestro cuerpo es incapaz de producirla. Su consumo en cantidades adecuadas dentro del contexto de dieta equilibrada se sabe que ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares (mejora los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre y las cifras de presión arterial) sí como ciertos cánceres como el mama, próstata y colon. En el mercado encontramos huevos enriquecidos con DHA, un ácido graso que mantiene el equilibrio de las grasas en la sangre, así como añadido en margarinas, productos lácteos, salchichas, …
Un exceso d DHA puede causar problemas en la coagulación de la sangre.
Es un ingredientes que se encuentra en el alimento de forma natural o añadido, y que tiene la propiedades de ayudar al crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas.
Pueden ser fibras solubles, como la lignia, o no soluble, como es el caso de los FOS.
Fructo-oligasacáridos (FOS)
Los encontramos leches, galletas o cereales que lo incluyen, pero de forma natural están en muchos vegetales. Los puerros, cebollas, ajos, tomates espárragos, alcachofas, legumbres,…contienen cantidades considerables de FOS.
Son sustancias vegetales, que bloquean la absorción del “coleserol” (LDL), eliminándolo con las heces.
Se encuentran de forma natural en manices, pipas de girasol, almendras, nueces, aceites vegetales de primera presión en frío…
En la industria se añaden a algunos lácteos, margarina o galletas, sin embargo, un consumo elevado de fitoesteroles puede asociarse a desequilibrios nutricionales, como niveles bajos e provitamina A o peor absorción de vitaminas liposolubles como A o K.
Conviene controlas la ingesta de fitoesteroles añadidos en niños, adolescentes, embarazadas, adres lactantes y personas con alteraciones en el aparato digestivo.
El Comité Científico de Alimentación humana recomienda no superar el consumo de más d tres graos al día ya que con esta cantidad no se reduce el colesterol en mayor medida. Por tato ello, la Comisión Europea ha autorizado el uso de esteroles y estanoles vegetales en la elaboración de alimentos como las margarinas amarillas, los aliños para ensaladas, la leche, las leches fermentadas, los yogures y el queso, las bebidas de soja, y las salsas picantes, siempre que se presenten en porciones que contengan cada una un máximo de 3g (si se consume una porción al día) o 1g (si se consumen tres porciones al día)
Vitamina C, E, beta-carotenos, cinc, polifenoles, …son sustancias antioxidantes, que funcionan como una barrera frente al efecto nocivo de los radicales libres sobre el ADN (los genes), las proteínas y los lípidos de nuestro cuerpo.
Su consumo contribuye a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas e incluso de cáncer.
Los polifenoles son compuestos que dan color a las frutas y verduras, por eso la recomendación es que se consuman 5 raciones de frutas y verduras al día.
Podemos comprar zumos e fruta, bebida de leche, galletas, enriquecidas con estos nutrientes, pero de forma natural, los encontramos en frutas, hortalizas, cacao, legumbres, frutos secos y aceites de oliva.
Nutriente presente en los vegetales favorece al tránsito intestinal, aporta sensación de saciedad, mejora los niveles de azúcar en sangra (glucemia), reduce el riesgo de cáncer de colon, capta sustancias en el intestino, como el colesterol, e impide su absorción. Por todo ello, las recomendaciones son que tomemos 30 gramos de fibra diaria.
Encontramos fibra dietética de modo natural en legumbres, verduras, hortalizas, grutas frescas, desecadas, frutos secos, cereales de grano entero…También podemos encontrarla añadida de forma artificial en alimentos enriquecidos, galletas, pan, leche…
ENRIQUECIDOS CON VITAMINAS Y MINERALES
Aunque ya no nos resulte extraño tener en casa productos que están enriquecidos en vitaminas y minerales, también forman parte de este grupo de funcionales.
Las vitaminas y minerales son nutrientes esenciales, que hay que administrarlos con la alimentación, qe no aportan energía y que son indispensables. Si no los aportamos en cantidad suficinte, tendremos carencias, y en situaciones extremas, enfermedades. A su vez, cantidades, excesivas de estos nutrientes pueden teenr un efecto tóxico o perjudicial, por lo que siempre se ha de recurrir al asesoramiento de un profesional antes de incluirlos en la deta. Debemos asegurar una ingesta diaria adecada con ua alimentación variada y equilibrada.
Vit A. Ayuda a la formación y mantenimiento de masa ósea. En los lácteos, al sacar al mercado los productos desnatados y semidesnatados, la comunidad económida europea ha acado una normativa que recomienda añadir las vitaminas liposolubles, A y D, que se pierden al eliminar la grasa. Las vitaminas D facilita la fijación del calcio en huesos y dientes y previene el raquitismo infantil y colabora en la reducción del riesgo de osteoporosis en el adulto.
Ácido fólico (vitamina B9)
En el embarazo es muy importante para revenir la espina bífida (defectos en el desarrollo del tubo neural del feto). Encontramos muchos alinentos enriquecidos, y en algunos países, la fortificación de ácido fólico en las harinas para elaborar pan es obligatorio.
Ejemplos: sal yodada, cereales de desayuno (hierro y folatos), lácteos y margarina enriquecida (vitamina A y D, calcio), derivados de la soja (calcio, vitaminas A y D), fórmulas y productos de alimentación infantil. También se encuentra a nuestro alcance en forma de complementos específicos.
RIESGO DE CONSUMO
Uno de los problemas actuales en relación con alguno de los tipos de productos enriquecidos en determinados nutrientes, vitaminas, minerales, etc, es que al encontrase en una gran variedad de alimentos pueden llevarnos a ingerir más del necesario, si superamos la ingesta recomendada por el fabricantes que sería la adecuada para obtener el efecto beneficioso de su consumo. Es decir, estos alimentos deben decirnos cuál es la cantidad diaria máxima que podemos consumir.
CONSEJO DEL EXPERTO
Cada vez estamos más interesados en conocer la relación que existe entre dieta y salud, sabemos que llevar un estilo de vida sano, incluyendo la dieta, pueden reducir el riesgo de proceder algunas enfermedades.
Un alimento funcional puede mejorar nuestra salud, ero hay que saber que no CURAN ni PREVIENEN enfermedades, y no sirven TODOS en cualquier circunstancia.
Deben ser una opción a tener en cuenta en determinado momento, como complemento de una dieta y estilo de vida saludable, aunque la ingesta de estos productos debe ser valorada por un profesional.
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